EL DISEÑO para la revolución 4.0

0
3934

El diseñador de la era pre-digital, no se enfrentaba a tantos problemas como hoy en día. Esta afirmación puede causar confusión a quienes piensen que el diseño gráfico actualmente es cosa de niños. La verdad es que la revolución digital ha hecho proliferar cientos de sitios y escuelas que prometen convertirte en “Diseñador Gráfico” en seis meses, tan solo con dominar los programas de edición digital básicos, un poco de Photoshop, de Corel Draw y ¡vualá! Ya eres todo un diseñador profesional.

Incluso, en el colmo del insulto, existen empresas que te aseguran que el logotipo de una empresa o algo tan valioso como una marca, puede ser diseñada mediante una herramienta web. Tan sólo escribe el nombre de tu empresa, elige una categoría de giro que sea acorde a tu negocio, escribe tres valores que la represente (Tradicional, moderna o disruptiva) y listo una “inteligencia artificial” diseñará tu logo.

Nada más falso, la gente que confía en estas herramientas, al final encontrarán que el “Programa inteligente” sólo acomodó las iniciales del nombre del negocio o jugó con una serie aleatoria de tipografías de forma que parezca un letrero llamativo, algunos programas incluso te permitirán elegir alguna forma caprichosa (que normalmente no tiene nada que ver con la imagen que deseas trasmitir) para que la uses como imagotipo junto con la tipografía.

Desde nuestro punto de vista, los que pagaron a una aplicación en línea para hacer su logotipo, tal vez merezcan usarlo y sufrir las consecuencias en su negocio por no invertir siquiera en contratar a un profesional para crear su imagen o logotipo.

Otro inconveniente de época es la enorme cantidad de variables que considera un diseñador actualmente a la hora de trabajar sobre una imagen corporativa de una marca, además de los usos que tradicionalmente se requerían para una identidad corporativa (tarjetas, hojas, folletos, carteles, o anuncios) se suman ahora los derivados de la revolución digital 4.0. Hablamos de los usos en redes sociales, videos, aplicaciones para móviles, e-mail marketing y por supuesto, su presencia en internet o página web.

Uno de los problemas cuando diseñamos para una página web es que el impacto y el tiempo es esencial, cuando termines de leer esta oración, alguien visitará y abandonará un sitio web, que no está bien diseñado. A menos que le des a tus visitantes una razón para quedarse, se irán tan rápido como llegaron. La tasa de rebote es el indicador de que eso sucede y por lo tanto de la falta de interés de los visitantes en tu sitio web.

Puede ser normal para un usuario revisar una página, especialmente si se trata de notas de prensa o contenidos de eventos especiales. Pero si tu objetivo es construir una relación con tus visitantes, necesitas hacer tu página lo más atractiva e intuitiva posible, muchos diseñadores ignoran algunos detalles y eso puede provocar que los usuarios no regresen a tu página una segunda vez.

Estos son algunos de los problemas más comunes en el diseño de sitios web:

No existe un camino, ni receta definitiva. ¿Quieres que tus usuarios o visitantes se sientan bien en tu página web?, Dales una cálida bienvenida, una forma fácil de entrar y salir. Demasiada competencia para llamar la atención en varios puntos es un distractor. Cuando proporcionas demasiadas opciones llamativas, el resultado más común será confusión.

Diseño anticuado. Si tu sitio estuvo de vanguardia en 2009. Entonces tal vez tiene un encabezado, un par de barras laterales y una gran cantidad de información que recorre el centro. ¿Adivina qué? Parece que tiene casi una década. Es hora de refrescarse con el pensamiento actual de diseño. El diseño de una página ha evolucionado durante la última década. En estos días, los mejores sitios dividen el contenido en bits más pequeños y digeribles.

Imágenes e iconos usados en exceso. Si los visitantes ven la misma imagen en varios sitios, erosiona la confianza. ¿Esa foto de personas sentadas alrededor de la mesa de conferencias? ¡No la he visto en otro lado! Es común usar la primera foto que encontramos en la librería, pero esto puede ser perjudicial al relacionar nuestra marca con otras que pueden usar la misma imagen. Lo mejor es gastar un poco más y comprar una foto exclusiva o hacer una foto propia.

Demasiadas texturas y colores. Querer agregar interés con muchas texturas y motivos puede, solamente generar desorden. Hay que tratar de limitar colores y fuentes. Mantener un esquema de color temático. Para sitios profesionales, tratar de limitar la variedad de fuentes a tres o menos.

Diseño por las razones equivocadas. Debemos comenzar siempre identificando al público objetivo y personalizando el diseño y el contenido. Puedes querer que el sitio se vea “moderno” o como a veces sucede, como algún otro sitio que haya visto tu cliente y al cual quiere que se parezca, pero si no ha detectado lo que su público necesita y quiere, puedes fallar miserablemente.

Los enlaces también cuentan. Cuando tus enlaces tienen nombres adorables e ingeniosos, la experiencia se cansa rápidamente. Los enlaces que no tienen mucho sentido, no son amigables para el usuario y no serán atractivos a tus visitantes. Sé práctico y básico al nombrar enlaces. Hazlo fácil para la gente. Diseño para visitas múltiples. Un slider giratorio es genial la primera vez, y quizás la segunda, pero en algún momento es solo una monstruosidad.

    

Sitio no esta optimizado para móviles. No deberíamos tener que recordarlo, pero los números no mienten. El móvil ya es la plataforma desde dónde más gente accede a sitios web por delante de las computadoras de escritorio. Es cada vez más probable que tus visitantes vean el sitio en una pantalla pequeña. Si tienen que pellizcar la pantalla y acercarse para leer, buscarán una mejor fuente de información. Asegúrate de probar tu sitio en teléfonos inteligentes y tabletas.

Deja que te encuentren fácilmente. Si deseas que los clientes te encuentren fácilmente, asegúrate de que la dirección, número de teléfono y horarios de atención sean muy accesibles en el sitio. Con demasiada frecuencia, esa información está oculta o completamente ausente.

Hay una gran cita que reza “un buen diseño es como un refrigerador: cuando funciona, nadie lo nota, pero cuando no lo hace, apesta”. Esto es cierto cuando estás aprendiendo a diseñar un sitio web. Podría pensarse que se necesita ser un genio de Silicon Valley o tener las herramientas más avanzadas para obtener un gran diseño gráfico en la web, pero la buena noticia es que eso es mentira.

Lo que sí se puede necesitar es una guía paso a paso adecuada sobre cómo diseñar un sitio web. Repasaremos los siete pasos claves que debemos seguir para diseñar un sitio web moderno, desde elaborar un plan de diseño hasta mantener el sitio.

Lo primero es lo primero: dar un paso atrás y crear un plan de diseño. Tratar de aprender a diseñar un sitio web sin un plan sería como pintar directamente en un lienzo sin bocetos.

Antes de comenzar a soñar con galerías de video y botones de llamada a la acción, hagamos estas cuatro preguntas:

– ¿Qué tipo de marca quieres construir? Toma un bolígrafo y papel y escribe los adjetivos que describen tu marca.

– ¿Cómo se vería el éxito? ¿Estás tratando de hacer ventas? ¿Promover una marca? ¿O simplemente divertirte un poco?

– ¿Qué tipo de características necesitas? Estos podrían ser los botones de suscripción al boletín y las redes sociales. Cuando eliges una plataforma de creación de sitios web, necesitas saber que este tiene las características que deseas.

– ¿Para quién es tu sitio? Piensa en tu futura audiencia. ¿Qué querrán encontrar?

Tu sitio debe reflejar las respuestas a estas preguntas. Por ejemplo, si necesita un sitio formal y profesional, querrás colores serios como el blanco y el gris. Tenemos más sobre esto más adelante.

Realiza una investigación de la competencia. Mira sitios similares a los tuyos. ¿Qué te gusta? ¿Qué no te gusta? Busca obtener un poco de inspiración. Este es un paso clave para aprender a diseñar un sitio web.

Antes de comenzar a diseñar, elige una plataforma para construir tu sitio. La elección típica es entre un creador de sitios web alojado como blogger, WIX o una opción de código abierto, como WordPress o una empresa de diseño web de servicios completos.

Ten en cuenta que debe ser moderno, tener mantenimiento periódico, poder hacer actualizaciones y ser fácilmente modificable.

Una vez que hayas elegido una plataforma de creación de sitios web, es hora de centrarse en la navegación y el diseño. Este es el primer paso creativo.

Los buenos sitios web son más que una cara bonita. Tienes que trabajar en un buen diseño con un aspecto web con estilo, pero también con sustancia.

La página de inicio es como la ventana de una tienda, por lo que es muy importante que te tomes el tiempo para hacerlo bien. Debe dejar a los visitantes bien claro de qué se trata el sitio con una sola mirada.

Una página de inicio efectiva facilita que los visitantes naveguen por el sitio. Debe quedar claro qué acción esperas que tome el visitante. Cubrir dos aspectos de la página de inicio: el diseño y la navegación del menú.

Una página de inicio tiene dos partes: arriba y abajo del pliegue. Al diseñar tu página de inicio, debes pensar bien qué colocar en cada sección.

– El pliegue es un concepto derivado del diseño de impresión, específicamente del diseño de periódicos en formato sábana o estándar. Los periódicos tienen un pliegue físico en la página, es el doblez que vemos cuando este está exhibido en los puestos de revistas, en la parte de arriba del pliegue está la cabecera, un par de grandes titulares y, probablemente, una imagen llamativa, debajo del pliegue están las historias menores, infografías y una nota o columna de autor o dos.

En la pantalla no hay pliegue físico, y muchos diseñadores web sienten que el pliegue no existe en el diseño web. Sin embargo, este punto de vista por lo general se debe a una mala interpretación de lo que es el pliegue en el diseño web, el contenido se considerará encima del pliegue si está visible en la pantalla a simple vista, antes de cualquier intervención del usuario. En otras palabras, si tienes que desplazarte para verla lo que está debajo del pliegue.

Por supuesto, no podemos planear para un solo pliegue, debido al número de dispositivos, sobre todo por el aumento exponencial de la web móvil, ya que son demasiado numerosos y distintos para establecer una línea horizontal fija en una página.

El contenido colocado aquí debe ser importante porque su visitante no tendrá que desplazarse hacia abajo para verlo. Por ejemplo, una oración que resume el valor que agrega el sitio a una empresa, una llamada a la acción que se vincula con su punto de conversión principal (por ejemplo, una suscripción a un boletín informativo).

– Debajo del pliegue. Más contenido en profundidad que admite el material del pliegue anterior. Por ejemplo, una “lista de beneficios”. Si eres un artista, esta lista explica por qué un visitante debe usarte.

A menudo, al aprender a diseñar un sitio web, menos es más. No permitas que tu sitio se llene o se complique demasiado. Comunicar el mensaje central del sitio es la meta principal.

¿Qué pasa con el posicionamiento del logotipo?

Si tienes un logotipo, hay varias opciones para elegir dónde colocarlo. Si el sitio se centra menos en la marca y más en productos o servicios que brinda la página web, coloca el logo en la misma línea que la barra de menús.

Si está más centrado en la marca, intenta colocar el logotipo en el centro debajo de la barra de menú. Obtendrás más espacio, pero puede enfocarse más en los mensajes comerciales que en la navegación. La barra de navegación es el menú que los visitantes utilizan para navegar por su sitio.

Saber cómo diseñar un sitio web de navegación que funcione implica:

– Añadir sólo las páginas necesarias.

– Construir categorías de enlaces relacionados

– Asegurarte de que los títulos de las páginas son cortos y claros

– Tratar de que la barra de navegación sea fácilmente visible

Cada sección de su navegación debe tener un objetivo final claro para el usuario. Sé específico en tus títulos. Por ejemplo, “compra calcetines retro” en lugar de “nuestros productos”. No sobrecargues a tus visitantes con demasiadas opciones. Esto conducirá a la parálisis de elección.

La mayoría de los sitios web colocan la barra de navegación en la parte superior de la página. Te recomendamos que hagas lo mismo. No necesitas reinventar la rueda. Aquí es donde los usuarios de la web esperan encontrar la navegación.

Asegúrate de incluir enlaces a las páginas de Contacto y Acerca de Nosotros y una página de Preguntas Frecuentes. Esto también le ahorrará tiempo respondiendo consultas individuales. Cuando hayas terminado, muestra tu página de inicio a tus amigos y familiares. Pregúntales qué piensan. Si encuentran confuso tu sitio, vuelve al tablero de
diseño.

Previous articleEl flujo de trabajo de KODAK PRINERGY marca el vigésimo aniversario de la transformación del funcionamiento de las impresoras
Next articleRevista Visión Digital edición de Junio