La fotografía publicitaria se inspira en la realidad, pero no la retrata con fidelidad como lo hace el fotoperiodismo. Por ello, es adaptada, postproducida y a veces incluso forzada para lograr objetivos estéticos específicos.
Las redes sociales están en nuestras vidas de manera cotidiana y permanente; la publicidad parece rodearlo todo; y la fotografía todo lo retrata… La mezcla de estas tres, resulta inevitable y en innumerables posibilidades.
Es por eso que cada vez más negocios recurren a las redes sociales para promover sus productos o servicios y el mundo publicitario alarga cada vez más su brazo digital para rodear a mayor cantidad de consumidores.
Pero no sólo se trata de abrir una cuenta de Facebook, Instagram, Pinterest, Twitter, etc. Se requiere investigación, estrategia, planeación y mucho sentido de la estética para sobresalir de entre los demás anunciantes, y esto último se logra, en gran medida, por medio de fotografías publicitarias que impacten realmente en el consumidor.
El problema viene a veces cuando estamos emprendiendo un negocio y, al menos por un tiempo, nosotros mismos tenemos que hacernos cargo de nuestras redes sociales. Por eso, compartimos contigo algunos consejos para que vistas tus redes sociales como un profesional.
MATERIAL
Puedes armar todo un estudio fotográfico, pero empecemos con lo básico:
• Cámara réflex o un teléfono celular con una buena cámara.
• Tripié. Te ayuda a que tus fotos no salgan movidas, a mantener mejor la atención en lo que haces y a hacerte más detallista, a mantener el encuadre entre toma y toma, entre otras cosas.
• Flashes y luwe relleno. En publicidad, la luz natural es poco controlable. Cuando dedicas horas a tus tomas y composiciones, requieres de una iluminación constante y uniforme. Aprender a dominar los flashes y las lámparas ofrece infinidad de opciones creativas.
• Reflectores. Cualquier superficie reflectante es útil. Un cartón plateado nos ayuda a conseguir un reflejo similar al agua. Con espejos dirigimos rayos de luz puntual a escenas concretas. Una cartulina blanca nos ayuda a rebotar la luz para suavizar las sombras, etc.
• Caja de luz. en el caso de que tomes fotografía de producto y bodegones.
• Props, ¡muchos props! Es decir, Utilería, un montón de objetos que usarás en tu set como apoyo para enriquecer la toma visualmente, por ejemplo, cartulinas de colores que te sirvan de base y de fondo, o si tomas fotos de alimentos, platos, cubertería, recipientes, servilletas, tablas, o tal vez cosas como confeti, pinturas, naturaleza muerta, dulces, juguetes… Las posibilidades son infinitas.
¡Manos a la obra!
Bien, ya tienes todo, pero, ¿cómo vas a tomar tus fotos?
• Planea. Haz una planeación al menos quincenal de los temas y contenidos a publicar. Después, define cada pieza. La imagen debe ir de acuerdo a la entrada de texto de cada post; descríbela lo más detalladamente posible (elementos a escena, iluminación, encuadre, etc.), para que no pierdas tanto tiempo al tomarla.
• ¡Ojo con la composición! Una de las fórmulas básicas para lograr composiciones llamativas que logren resaltar tus productos es la regla de los dos tercios. Seguramente tu cámara fotográfica (incluso la de tu celular) cuenta con una función que activa una cuadrícula que divide tu pantalla en nueve; los cuatro puntos de intersección de esta cuadrícula te marcan dónde situar a los sujetos u objetos en el encuadre. Esta técnica es particularmente útil cuando se trata de retratar personas.
• Usa al menos dos fuentes de luz (una principal y otra de relleno) y en el caso de fotografía de producto hazlo en un lugar en el que puedas controlar las condiciones lumínicas en todo momento.
• Para redes sociales funciona muy bien el punto de vista frontal, es decir, la cámara debe colocarse delante o encima del producto.
• Toma en cuenta los tamaños de las imágenes para redes sociales. En Facebook la foto de perfil es de 180 × 180 píxeles, y para portada es de 851 × 315 píxeles; la imagen se recorta en dispositivos móviles y queda un área visible de 560 × 315 píxeles de la parte central. Twitter tiene para imagen de perfil 400 × 400 píxeles, y para portada 1500 × 500 píxeles. En Instagram la foto de perfil tiene 110 × 110 píxeles. Consulta constantemente las especificaciones de cada red social, porque suelen cambiar constantemente.
• Lleva tu flash y también aprovecha la luz natural en la toma de fotos en exterior. Recuerda que en verano el sol de mediodía nos da sombras más duras y contrastes fuertes. Al contrario, en las primeras horas de la mañana o al atardecer, la luz tiene un toque especial, casi mágico. Aprovechar los días nublados o buscar la sombra también puede ser una buena opción.
• Fíjate en el “balance de blancos” de tu cámara para controlar la temperatura de color, o incluso lograr que tus fotos sean más cálidas o más frías (azuladas). Muchas cámaras de celular permiten regular el balance de blancos. Utiliza el modo manual para poder elegir el tipo de luz (sol, fluorescente, incandescente…). También toma en cuenta que muchos editores de fotos tienen la opción de regular el balance de blancos una vez tomada la fotografía.
• Sé especialmente cuidadoso con las imágenes de tu perfil y portada. ¡Son las más importantes!
¿YA LAS TOMASTE? ¡EDÍTALAS!
• Puedes hacerlo en Photoshop a la manera tradicional (que además ofrece resultados mucho más profesionales). Sin embargo, si no lo dominas, la mayoría de los celulares tienen un editor ya cargado y normalmente es bastante bueno. Así que gira tus fotos, recórtalas, haz ajustes de iluminación, de color, pon filtros, ¡experimenta!
• En Instagram hay una aplicación que se llama Layout que sirve para hacer composiciones con tus fotos. Lo hay tanto para Android como para IoS. Es muy amigable, y cuando hayas creado tu composición puedes compartirla en Facebook o Instagram.
• También para ambas plataformas está Canva, que es una de las aplicaciones más completas para edición de tus fotos. Puedes usarla directamente en la web o bajar la aplicación a tu celular. Con esta puedes insertar tu logo sobre tus fotos, pero debes tenerlo guardarlo en formato PNG con fondo transparente.
• Si quieres utilizar textos, te recomendamos utilizar la tipografía que usas en tu imagen corporativa; si no, elige la más parecida que encuentres en Canva o alguna que combine con tu logotipo y tipografía institucional y sé constante en su uso, no mezcles diferentes tipos de letra sólo por capricho.
• Canva también te ofrece más funciones y mejor control sobre el tamaño de las imágenes y los elementos de tu composición.
Como ves, tienes todos los recursos y consejos a la mano para hacer de tus fotos algo verdaderamente emocionante y profesional; simplemente necesitas ser creativo y experimentar, pero siendo autocrítico, porque recuerda que son la imagen de tu negocio, de tu empresa, de tu
calidad.
También te recomendamos el artículo: Fotografía de moda para redes sociales