Los materiales y técnicas para la fabricación de letreros, cajas de luz y letras corporativas siempre se adecuan a las necesidades de la época. Las placas de aluminio compuesto y el regreso del policarbonato son algunas nuevas tendencias para estas aplicaciones.
Con disponibilidad de avanzadas tecnologías de corte, nuevos materiales y costos accesibles, se puede decir que la era de la producción de aplicaciones que conllevan un proceso de corte de metal se encuentra latente.
Perfilando el mercado
Hace 30 años, el mercado estaba muy cargado hacia fabricar las caras de las letras corporativas y las pantallas de caja de luz en acrílico y policarbonato. De acuerdo a Ricardo Ponce de León, especialista en letras y anuncios luminosos con más de quince años de experiencia, hace una década se comenzó a observar una transición hacia la lona traslúcida.
Sin embargo, pareciera que hoy en día, los acrílicos y policarbonatos han vuelto a caer en la gracia de los fabricantes debido a su calidad o garantía de durabilidad. Esto se debe a que la lona, pese a ser de una marca reconocida, tiene un periodo de vida útil de 6 años. Ponce señala que esto merma la inversión de los clientes, ya que se ven obligados a cambiar este sustrato cada tanto tiempo.
La versatilidad del aluminio
Desde siempre, el aluminio y el acero inoxidable han sido metales indispensables para la señalización. Aunque el acero inoxidable se ha mantenido constante, el aluminio ha sido fuente de innovación en las últimas fechas. Por un lado podemos encontrar el aluminio natural o crudo, el cual está presente en cartelería, ventanas o puertas. De ahí se originó el aluminio cepillado, un sustrato cuya apariencia jaspeada fue ideada especialmente para crear acabados más elegantes. Posteriormente llegó el cepillado dorado o plateado con acabado de espejo el cual, a su vez, dio lugar al aluminio de colores. Aunque antes no era común ver este tipo de láminas, ahora los fabricantes de letreros cuentan con la opción de adquirirlas en vez de pintar su producto. Inclusive, esto les permite crear letreros específicos que se adecúen a la imagen corporativa de ciertos clientes, ya que pueden contar con sustratos como el llamado “rojo Coca-Cola” o el “azul Telcel”.
Asimismo, la presencia de un nuevo producto en el mercado también ha causado revuelo. Se trata de los paneles de aluminio compuesto, unas hojas de un aluminio especial que posee la particularidad de tener un alto grado de flexibilidad si se le realizan algunos pequeños cortes o ranuras en la parte de atrás. Esto le permitirá doblar el material, moldeándolo según sus necesidades. Entre sus aplicaciones podemos encontrar la fabricación de anuncios, la remodelación de fachadas, la construcción arquitectónica, revestimientos, POP y exhibición. Marcas como Alucobond, Alucomex y Alupanel (distribuido por Tubelite) ofrecen este sustrato en diferentes colores. Avance y Tecnología también tiene a su disposición el Aluminio Compuesto Gridpanel en 8 colores de línea y más de 30 tonos sobre pedido.
El termoformado
El termoformado también está ganando fuerza. Anteriormente, los logotipos para señalización se hacían con una vista plana unidimensional. Con el paso del tiempo entraron los logos con segunda dimensión a letras realzadas. Actualmente, el termoformado puede producir letras de tercera, cuarta y quinta dimensión con un mayor realce. Aunque son pocos los clientes finales que se han aventurado hacia anuncios termoformados debido a los elevados costos, Ponce detecta que el uso de herramientas automatizadas se trata de una tendencia clara. Entre las ventajas del termoformado están la durabilidad, ya que puede durar más de veinte años, y su alta resistencia al desgaste y a la intemperie. Asimismo, se puede volver a rotular o pintar fácilmente.
Tecnología para moldear
Aunque las máquinas automatizadas declaran que pueden realizar estos terminados por sí solas, existen fabricantes que continúan optando por una producción más “artesanal”.
Para Elliot Hord, empresario de la compañía St. Joe Signs, esta decisión radica en las necesidades de cada empresa. Pero, ¿qué factores se deben contemplar al momento de deliberar este importante aspecto?
Para Hord, la respuesta es el volumen y la consistencia. Quien tiene que producir un volumen muy alto, el tener que esperar de 16 a 24 horas para poder producir determinada cantidad de letras corporativas a mano resultaría impensable. Sin embargo, si éste fabricante contara con un router CNC y una máquina Accu-Bend, podría obtener la misma cantidad de elementos en un promedio de 8 horas.
Las llamadas “benders”, o dobladoras, son máquinas que realizan automáticamente los cantos y listeles de las letras a partir de bobinas de aluminio y acero inoxidable. Llegando a pesar hasta 800 kg, estos equipos de acero soldado pueden manejar material de alto calibre y producir letras, formas y logos de una sola pieza que midan hasta más de 10 metros de altura. Por lo general, trabajan con archivos DXF, un formato para dibujos diseñado para posibilitar la interoperabilidad entre los archivos .DWG, usados por el programa AutoCAD, y el resto de programas del mercado. Marcas como Accu-Bend, EasySign Bender y Accu-Cut, son algunas de las opciones disponibles en el mercado.
Hecho a mano
Sin embargo, incluso con estas máquinas automatizadas todavía hay un poco de trabajo que debe ser hecho a mano, como es el caso de las actividades de pegar, cablear, pintar e instalar. Ponce establece que, pese a todos los avances tecnológicos, hoy en día no existe una máquina que pueda hacer un letrero completo. Aunque éstas puedan ayudarle a realizar algunos acabados, cortes, dobleces o formas, sucede que, por más precisas que sean, no logran hacer los ajustes finales para que los materiales embonen bien unos con otros.
Existen diferentes tipos de máquinas más tradicionales que pueden auxiliarlo. Desde las cortadoras de láser y plasma, hasta las de chorro de agua y perforación mecanizada, todas y cada una tienen sus puntos fuertes y puntos débiles que las hacen preferibles para ciertas operaciones. Por ello, si usted ha optado por no invertir en una máquina tipo bender, se recomienda que sí se apoye en un Reuter CNC o una cortadora. Algunos de los equipos líderes en el mercado de cortadoras y routers CNC incluyen a los de la marca Vy-Tek Laser Technologies, Zünd, Seiki México y Esko. También puede complementar su producción con una impresora de cama plana como las Rho 1030 o Rho P10 250 de Durst.
Agradecemos a Elliot Hord de St. Joe Sign y Ricardo Ponce de León de Novagraphics por la información proporcionada durante ISA Sign Expo 2014 y ExpoPublicitaria 2014 para la elaboración de este artículo.