Kit para el control de color, herramientas básicas para colores exactos

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En todo proceso de impresión, mantener una consistencia en los colores de cada una de las reproducciones de la imagen es primordial para considerar exitosa la producción.

En la tarea de asegurar colores exactos intervienen diferentes aplicaciones de software, pero también juegan un papel relevante los accesorios físicos, diseñados para tareas muy especializadas.
Si aún no lo tiene, considere la importancia de contar con un “kit básico” de herramientas con las que pueda asegurar a su cliente la precisión en los tonos de sus impresiones. Mariana Sierra, Directora General de Standard Color, comparte para Visión Digital cuáles son los principales recursos que necesita y qué novedades hay en lo referente a las herramientas de control de color.

Espectrodensitómetros
Los impresores necesitan hacer la medición de dos cualidades distintas: la densidad de la tinta sobre el papel y el color de la imagen. Ambas variables intervienen en la manera en que percibimos el color. Para obtener estas cifras, pueden utilizarse dos herramientas por separado: el espectrofotómetro y el densitómetro; o bien, un espectrodensitómetro que combina funciones para medir ambas características.
Entre los productos novedosos que X-Rite tiene para medir el color y la densidad, sobresale el eXact, un equipo con pantalla táctil e interfaz intuitiva que facilita el proceso de medición y control de color. También existen varios modelos portátiles, como el espectrofotómetro 0°/45° 939®, que funciona con el software X-Rite Color Master.

Cabinas de visualización
Contar con un ambiente controlado de luz es esencial para visualizar correctamente las pruebas de color. La iluminación del espacio debe estar calibrada y se requiere tener una cabina de visualización adecuada al formato de nuestras impresiones; es decir, si las pruebas de color serán tamaño carta u oficio, será suficiente con una cabina pequeña o de escritorio, pero necesitará una cabina de mayor tamaño si sus impresiones tienen un formato grande.
La empresa Macrolab comercializa dos modelos de cabinas de visualización: SpectraLight III y Judge II-S, de X-Rite Macbeth Lighting. Con las cabinas puede simular luz de día, fluorescente, incandescente o UV.

Plotter para pruebas
La impresora que utilice para generar sus pruebas de color debe asegurar la mayor estabilidad cromática posible; es decir, que no presente variación en los tonos finales de las imágenes. En ese sentido, lo más recomendable es recurrir a cartuchos nuevos de tinta, pues ofrecen un desempeño constante y no corren el riesgo de distorsionar los colores, como podría ocurrir con los cartuchos de tinta rellenados.
Algunas opciones de alta calidad son los plotters Epson Stylus Pro WT7900® y Epson Stylus Pro 9880®. Ambos son capaces de simular la calidad flexográfica, con lo que se logran pruebas de color fieles para sus proyectos.

Papel para pruebas
En conjunto con el plotter para pruebas, el papel de pruebas es otro de los componentes indispensables en el proceso de control de color. El papel que seleccione debe cumplir con características básicas como: presentar un mismo tono blanco en todos sus lotes (conocido como “punto blanco”), preservar los tonos de las tintas de impresión, y por supuesto tener el tamaño adecuado a su proyecto.
En el mercado podrá encontrar papeles con diferentes terminados, como satinado, mate o brillante, con base de resina o base de papel, así como opacidad y peso variable. Algunas marcas que ofrecen papeles para prueba son GMG Color y FineEye Color Solutions.

Calibración de monitores
La ventaja de contar con un monitor calibrado es la posibilidad de ver el color de la computadora de una manera más correcta, mucho más cercano al resultado de la impresión. La idea es que pueda ver el impreso contra la pantalla y que se vean similares. Sin embargo se debe tener en cuenta que siempre habrá una diferencia entre el color luz del monitor (RGB) y el color pigmento de la impresora (CMYK).
El dispositivo i1 Display de X-rite, que además cuenta con un diseño mejorado más ergonómico, funciona para dos cosas: calibrar monitores y calibrar tintas de impresión. El equipo se coloca sobre el monitor y a través de una serie de proyecciones que realiza el software, hace una serie de registros y ajustes de acuerdo a la iluminación que recibe y a los valores de luz del monitor.

Verificadores de color
Para los profesionales que trabajan con fotografía, los verificadores de color o color checkers son una especie de tabletas de colores o con escalas de grises, que sirven para corroborar la fidelidad de los tonos en las tomas. Durante la captura fotográfica se colocan estos verificadores frente a la cámara, y una vez en la computadora se toman los valores de los colores en Photoshop (con la herramienta de gotero) para verificar que coincidan con los tonos reales y que tengan la temperatura correcta. Este proceso se complementa con un software especializado, auxiliar en el control de los colores.

Un agradecimiento a Mariana Sierra, Directora General de Standard Color, S.A. de C.V. por su colaboración para la redacción de este artículo.

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