La fotografía de conciertos es una rama muy divertida y retadora de este arte, y si sabemos dominar nuestra cámara podemos obtener resultados impactantes. Por el contrario, si no tenemos mucha idea de cuál es la técnica para este tipo de tomas, lo más probable es que lo único que consigamos sean frustraciones.
Tipos de concierto
Hay distintos tipos de concierto. Puedes comenzar en uno que se realice en un bar. Aunque suena sencillo, a veces es más difícil porque la iluminación suele ser deficiente y el fotógrafo se ve obligado a abrir completamente el diafragma, elegir un ISO muy elevado y a bajar la velocidad, lo que ocasiona fotos movidas, poco nítidas y con ruido. Una ventaja de los bares es que puedes acercarte más para captar expresiones y detalles.
El flash es una opción que aunque a muchos no les gusta, puede salvar la situación. Si tienes un flash con esclava y un ayudante, pídele que se ponga a unos 50 grados de donde tú estás disparando y que dirija la luz hacia el sujeto.
También hay cables de extensión para flash que te permiten sostenerlo tú mismo en un ángulo distinto del que estás efectuando el disparo; conecta el flash, tómalo con la mano izquierda y aléjalo de la cámara para que el destello no provenga del mismo lugar. Y si no tienes cable, prueba rebotar la luz en el techo o en la pared más cercana. Si usas el flash y lo combinas con velocidades bajas (1/15, por ejemplo) podrás captar el efecto de las luces del lugar.
Otros aliados para este tipo de conciertos serán los lentes que permiten grandes aperturas (f/1.4, f/1.8, f/2.8), que por lo regular son de 50 u 80 mm. En todos los conciertos, el objetivo a utilizar depende de la distancia a la que te encuentres del escenario y los encuadres que quieras hacer.
Los conciertos en teatros son más sencillos de fotografiar porque la iluminación está mejor planeada para hacer lucir bien el escenario, por lo que no será necesario forzar tanto el ISO y podrás disparar a velocidades de 1/125 a 1/320.
En los teatros es importante tener permiso para tomar fotografías desde el foso, que es el lugar frente al escenario, y si ya estás en el foso, ¡aprovéchalo! Comienza por los costados y poco a poco ve hacia el centro, cuélate entre los demás fotógrafos y logra tomas desde varios ángulos.
En los megaconciertos y festivales en grandes escenarios el despliegue de luces es mucho mayor, con reflectores de gran intensidad y colores cambiantes que van directamente hacia el artista, lo que nos da la posibilidad de disfrutar mucho más nuestra tarea.
Aquí lo mejor es disparar a la mayor velocidad que te permitan las condiciones de luz, por ejemplo, 1/320, con una apertura de f/2.8 a 5.6 y un ISO de 400. Si estás entre el público lo más adecuado es usar un objetivo largo.
A tomar en cuenta
A continuación te damos algunos consejos generales para lograr fotos de cualquier tipo de conciertos fantásticas:
Hay que saber cuándo disparar. Busca el momento clave, cuando un músico está realizando un solo, o el cantante luce apasionado, cuando adopta una posición grandiosa. Espera a que el cantante se aleje del micrófono para que no le haga sombra en el rostro, y espera a que el escenario esté iluminado y el artista se dirija hacia la luz.
En los conciertos las luces suelen ser muy cambiantes, así que usa el balance de blancos en automático, y si hay que corregir algo ya lo harás durante la edición del material.
Usa lentes luminosos, de f/2.8 en adelante, pero no te claves en sólo usar grandes aperturas porque éstas no son las que te van a brindar mayor nitidez. No pierdas la oportunidad de experimentar con las aperturas y la profundidad de campo.
Utiliza la medición puntual o medición promediada al centro, ya que la luz de los escenarios es muy cambiante y suele centrarse en zonas específicas.
¿Y el modo de disparo? Definitivamente en manual.
Acostúmbrate a ello y obtén el control de todas tus tomas. Recuerda que el que manda eres tú, no tu cámara.
Aunque hay cámaras que dan la posibilidad de usar sensibilidades ISO muy altas, lo recomendado es quedarte entre valores de 800 o 1600 para no tener demasiado ruido en la foto.
Observa el histograma en la cámara para asegurarte de que las fotografías están expuestas correctamente. Si te encuentras en dificultades para exponer una foto, es mejor subexponer para poder recuperar información de las sombras en el proceso de edición, que sobreexponer y perder la posibilidad de recuperar los detalles.
Los fondos oscuros y simples funcionan bien. Cambia de posición Si tienes elementos de colores muy vivos o luces potentes apuntando hacia ti. Pero si hay una fuente de luz dirigida directamente a la espalda del artista, aprovéchala para hacer un contraluz impactante.
Finalmente, practica mucho y disfruta a lo grande de los conciertos. Lo más importante no es tener la cámara más sofisticada sino tu propia imaginación y el modo en que desarrollas tus conceptos. Después del concierto, lo más gratificante será llegar a casa y ver el resultado de lo que lograste con tu ojo fotográfico.