Si el cuidado del medio ambiente es algo que todavía no le quita el sueño, tal vez podrá encontrar una motivación en el hecho de que el reciclar, reusar, reducir y eficientar son estrategias que volverán a su empresa más rentable
Si aún no ha tomado medidas para que su empresa sea sostenible y socialmente responsable, piense que esto no sólo sería positivo para el planeta, sus ecosistemas y todas las especies que habitamos en él. Si el cuidado del medio ambiente es algo que todavía no le quita el sueño, tal vez podrá encontrar una motivación en el hecho de que el reciclar, reusar, reducir y eficientar son estrategias que volverán a su empresa más rentable; representarán grandes ahorros desde el corto al largo plazo y mejorarán la posición de la empresa con sus grupos de interés.
Tenga en cuenta las oportunidades que se le presentan para reducir costos y mejorar su competitividad. Muchos proveedores de servicios de impresión aún ven a las iniciativas de sostenibilidad como un gasto adicional que consumen capital y erosionan sus ya escasos márgenes de ganancia, pero afortunadamente hay un número creciente que está descubriendo que invertir en medidas de sostenibilidad y en la búsqueda de la certificación de las distintas organizaciones que reconocen y avalan este tipo de esfuerzos genera un ahorro en el balance final y hace que se les considere de mejor manera en este mercado, que es muy competitivo.
Es necesario tomar acción.
En la actualidad son muchas las organizaciones y empresas que levantan la voz a favor del cuidado del planeta; pero que tanto ruido no nos engañe: la apatía sigue patente y en México estamos en pañales en el tema del respeto al medio ambiente. Debemos de asumir este tema como una responsabilidad global.
Usar menos papel, agua o luz, separar basura y compartir el auto, son esfuerzos muy buenos, pero aislados. Además de esas acciones, se trata de promover un cambio total de visión en el que cada empresa y sujeto pueden poner su grano de arena, que todos colaboren en la conformación de una sola conciencia. Así, cada iniciativa, grande o pequeña, se convertirá en parte de una realidad más amplia.
Cadenas de suministro verde
Muchas de las grandes corporaciones, organizaciones civiles y gobiernos esperan (o deberían esperar) que sus proveedores trabajen en términos de reducción de impacto ambiental y sean coherentes con el marketing verde que tanto se ha difundido. De este modo, buscan ser sustentables también a través de sus proveedores, quienes deben ser cada vez más rigurosos en la medición y gestión en cuanto a los combustibles fósiles, el uso del agua, además de reducir sus envases y la producción de residuos sólidos, entre otros aspectos. Esto ocurre sobre todo en países de primer mundo, y si en México realmente queremos sobrevivir al difícil momento que están atravesando las imprentas, tenemos que ir tomando medidas al respecto.
Por ejemplo, la empresa Procter & Gamble está en la segunda fase de aplicación de su tarjeta de puntuación del proveedor de sustentabilidad ambiental, que fue implementada hace más de un año con casi 400 proveedores estratégicos, y mide anualmente el uso de energía, agua, eliminación de residuos y las emisiones de gases de efecto invernadero. La lista de proveedores y agencias se va incrementando, y los resultados de la tarjeta de puntuación se incorporarán a evaluaciones de desempeño, por lo tanto afectarán la oportunidad de un proveedor para el negocio, además de que podrá ser reconocido y recompensado públicamente.
Así, hay cadenas de suministro sostenible que están siendo desarrolladas por compañías como P & G, Ford, Wallmart, IKEA, y otras iniciativas como el Consorcio de Sustentabilidad (www.sustainabilityconsortium.org) en Estados Unidos, que se han centrado en crear herramientas y sistemas de medición para cuantificar el desempeño ambiental de todas las empresas y productos en sus cadenas de suministro extendidas, entre las que se encuentran las de la industria gráfica y de impresión.
¡No lo tire a la basura!
Otro esfuerzo realizado por algunas empresas es llevar el reciclaje a algo más que separar basura. Por ejemplo, si en su negocio utilizan equipo Hewlett-Packard, entonces tiene una opción de contribuir, porque esta empresa implementó un programa de recolección de cartuchos de tinta y tóner de las impresoras.
Dichos productos se recogen de forma gratuita mediante fletes o mensajería para ser enviados a plantas en Estados Unidos, donde son transformados en partes para automóviles, ganchos de ropa, postes para cercas, suelas de zapatos o tejas para techos.
La empresa que desee participar en el programa sólo tiene que consultar la página web de Hewlett-Packard o la información impresa en las envolturas de los cartuchos. En México se desechan alrededor de 180,000 toneladas de basura electrónica al año, la cual, al igual que los cartuchos, requieren de sistemas de reciclaje especiales, y este tipo de iniciativas representan muy buenas opciones para volver a aprovecharlos.
En Estados Unidos, tirar las baterías de plomo a la basura es ilegal en 41 estados, por lo que empresas como Home Depot, Staples, Radio Shak y Best Buy tienen programas para reciclar las baterías recargables, diversos aparatos electrónicos, lámparas fluorescentes, embalajes, electrodomésticos, etc.
Pero no sólo las grandes empresas contribuyen a la reutilización de los materiales, pequeños empresarios en el país han estado adoptando estrategias propias y de otros países para la reutilización de materiales. Mani Padme, de la empresaria Silvana Bressan, en Cancún, fabrica bolsos, cangureras, carteras y otros accesorios con lonas impresas, telas y demás materiales reciclados. Asimismo, la empresa Senda Natura, de Cabo San Lucas, tiene un amplio catálogo de productos fabricados con material reciclado, entre lo que se incluyen desechos de la industria gráfica como papel, discos compactos, lonas, plásticos, telas, cartón, desechos de oficina, que se utilizan para hacer los objetos más variados como libretas, muebles, bolsas, collares y otros accesorios, móviles, marcos para cuadros y fotos, agendas, lámparas, cortinas, esculturas, etcétera.
Otra opción es contactar a una empresa que haga recolección de basura reciclable, que además de librarte de ella, paga por llevársela.
Pasar a la acción
La imprenta sostenible no es un sueño, al contrario, urge que todos los miembros del sector tomen conciencia del impacto ambiental que estas empresas están produciendo, por lo que tenemos que buscar rápidamente un camino efectivo para reducir los contaminantes, el derroche de recursos, así como el uso de químicos tóxicos en los procesos de producción.