
La industria gráfica ha sido históricamente un sector dominado por hombres, especialmente en los niveles de decisión y liderazgo. Sin embargo, en los últimos 25 años se ha visto un cambio importante: la incorporación femenina ha crecido de manera constante, aunque aún persisten brechas que es necesario cerrar para lograr una verdadera equidad.
En el año 2000, menos del 10 % de la fuerza laboral en la industria gráfica estaba integrada por mujeres. Para 2025, esa cifra se ha elevado hasta alcanzar alrededor del 35 %, lo que refleja un avance significativo en la inclusión laboral femenina. A pesar de este crecimiento, la mayor parte de las mujeres se concentra en áreas administrativas u operativas, mientras que su representación en los puestos de liderazgo sigue siendo limitada.
El caso de México resulta ilustrativo. En el año 2000, las mujeres representaban apenas el 20 % del personal en el sector. Dos décadas después, en 2020, la cifra ya alcanzaba el 35 %, mostrando una tendencia positiva y sostenida. No obstante, un análisis de las 50 principales empresas proveedoras del sector gráfico revela que solo el 8 % de ellas tiene mujeres en cargos directivos o de alta gerencia, lo que evidencia una clara subrepresentación en los niveles más estratégicos.
La brecha de género también se refleja en el terreno salarial. Según el artículo, las mujeres en México perciben en promedio un 22 % menos que sus colegas hombres en el mismo sector. La tendencia es similar en otros países de Latinoamérica: Brasil -20 %, Argentina, Colombia y Chile -18 %, y Venezuela -16 %. Esta disparidad salarial demuestra que, aunque se ha avanzado en inclusión, la igualdad económica aún es un reto pendiente.

Otro punto crítico está en los organismos de representación empresarial. Asociaciones de gran relevancia como CANAGRAF (México), AGA (Argentina), ABIGRAF (Brasil), Andigraf (Colombia) y ASIMPRES (Chile) mantienen consejos directivos compuestos exclusivamente por hombres. Esto limita la voz femenina en la toma de decisiones clave que marcan la ruta del sector en cada país.
Sin embargo, también existen señales de cambio y oportunidades. Cada vez más mujeres están asumiendo roles técnicos, creativos y de innovación, rompiendo con la idea de que su participación se limita a labores administrativas. Su incorporación en áreas de diseño, tecnología de impresión, gestión de color y desarrollo de nuevas aplicaciones muestra que el liderazgo femenino puede aportar una visión fresca y transformadora para la industria.
El reto hacia adelante no es únicamente aumentar la presencia de mujeres en el sector gráfico, sino garantizar que tengan acceso a posiciones estratégicas y de liderazgo, donde puedan influir en la toma de decisiones y contribuir al desarrollo de una industria más inclusiva, equitativa y diversa.
El Día Internacional de la Mujer nos recuerda que este no es solo un tema de justicia social, sino también de competitividad. Diversos estudios globales señalan que las empresas con mayor diversidad de género en sus equipos directivos son más innovadoras, más resilientes y logran mejores resultados financieros. La industria gráfica no es la excepción: sumar el talento y la perspectiva de las mujeres no solo fortalece al sector, también lo prepara para enfrentar los desafíos del futuro.