Por Mercè Barcons
Directora Mundial de Gran Formato de HP
Incluso antes de la pandemia, las disciplinas de diseño estaban en un proceso de evolución de un mundo lineal y analógico a uno digital y programático. La impresión y el diseño impreso no eran una excepción a esta tendencia, con la impresión digital y sus capacidades de personalización estaban desempeñando un papel cada vez más importante en áreas como el marketing y mejoraban notablemente la experiencia del cliente. En la actualidad, la respuesta ante el COVID-19 ha venido a acelerar esta tendencia.
La señalización juega un papel importante a la hora de ayudar a la gente a sentirse segura y normalizar sus vidas durante la pandemia. Ninguna campaña de salud pública puede tener éxito a menos que se muestre de manera impactante y fácil de entender. En este punto, los profesionales del diseño y la impresión en gran formato son cruciales para que esto suceda.
Diseñando en un mundo distribuido
Como en la mayoría de las profesiones, los creativos deben encontrar ahora una manera de adaptarse a la nueva realidad del trabajo a distancia en equipos distribuidos. Un mundo en el que los diseñadores, sus clientes y su público pasarán el mismo tiempo en las oficinas adaptadas en sus propias casas como en los estudios profesionales, centros de coworkings y espacios públicos. Esto hará que la flexibilidad y la personalización sean más importantes que nunca.
Una respuesta obvia a la nueva norma es crear impresoras de gran formato y otras herramientas de diseño que sean compactas, fáciles de manejar y de mantener, pero que al tiempo ofrezcan un alto nivel de calidad y sean adecuadas para su uso en la oficina en casa. Sin olvidar que su fabricación debe estar basada en modelos de producción sostenibles, para respetar al máximo el medio ambiente. El desafío es crear impresoras que combinen la impresión en gran formato con un diseño compacto sin comprometer la sostenibilidad. Deben consumir menos tinta, deben utilizar materiales reciclados siempre que sea posible y deben ser fáciles de configurar y reconfigurar con rapidez. Estas son las características principales que HP tuvo más en cuenta el desarrollo de las nuevas impresoras de gran formato HP DesignJet.
Ya se trate de la relación de trabajo de un director de arte y un redactor en un equipo creativo clásico, o de los flujos de trabajo interrelacionados de un arquitecto y un ingeniero civil, el diseño industrial y las industrias creativas dependen de profesionales cualificados que trabajan en estrecha colaboración. En la nueva realidad de trabajo distribuido, los profesionales creativos requieren máxima flexibilidad en las herramientas de diseño e impresión para responder a sus necesidades a la hora de colaborar, compartir y revisar en tiempo real.
Esto significa un mayor uso de plataformas de almacenamiento en la nube y de distribución de contenidos, más integradas en el proceso de diseño que nunca. El control de versiones también será más importante: si ya no se está sentado junto a los compañeros de trabajo, resulta más difícil coordinar quién está trabajando en qué.
La personalización de los flujos de trabajo, los dispositivos y las herramientas de diseño también se convertirán en factores críticos de éxito para los creativos. Las empresas deben adquirir los dispositivos y las herramientas de diseño necesarias para adaptarse a este nuevo estilo de trabajo más pronto que tarde.
Los usuarios autorizados también deben poder enviar archivos hacia y desde dispositivos distribuidos como escáneres e impresoras de gran formato. Esto permitirá a los profesionales creativos probar, marcar y modificar los archivos en tiempo real, como lo harían cuando trabajan en el estudio o la oficina.
Las imprentas deben conectar con los clientes allá donde estén
Más allá de los detalles esenciales de la colaboración, los proveedores de servicios de impresión deben esperar un aumento de la demanda de señalización de rápida rotación y otros trabajos de diseño. En algunas regiones, los reglamentos y la orientación que rigen el distanciamiento social cambian casi semanalmente.
Es poco probable que esto cambie a corto o mediano plazo, ya que es evidente que sigue siendo necesario seguir respondiendo a las necesidades marcadas en materia de salud pública. Si, por ejemplo, las nuevas medidas de distanciamiento social cambian la forma en que los compradores deben desplazarse por una tienda, es muy probable que gran parte de la señalización promocional e informativa actual de esa tienda se tenga que actualizar.
Para lograr este tipo de rápido rediseño e impresión, respetando el distanciamiento social con el cliente, las tiendas tendrán que utilizar las mismas funciones de colaboración remota y co-diseño al interactuar con los clientes que los diseñadores gráficos y los arquitectos utilizan para colaborar a distancia.
Las empresas deben ser capaces de informar a la imprenta, enviar archivos y marcar modificaciones sin necesidad de visitar la tienda. Deben ser capaces de imprimir -y permitir que otros impriman- esquemas, borradores y otros trabajos en bruto en una gama de tamaños, ajustes de calidad, desde múltiples lugares durante el proceso de finalización del diseño terminado.
Las compañías que tienen la tecnología y la experiencia para ofrecer este servicio -para crear productos de gran formato personalizados de manera que encajen perfectamente con las necesidades y prácticas de trabajo posteriores a la pandemia- serán las que prosperen durante los próximos 12 meses. Y la buena noticia es que lo que nace de la necesidad puede resultar una ventaja a largo plazo. Más personalización significa menos desperdicio, para empezar, lo que es bueno para el balance final del negocio y para el medioambiente.