Las videowalls son “pantallas” que cubren espacios tan grandes como un muro. Aunque pueden tener una configuración tradicional, usted puede jugar con la posición de los componentes para hacer un collage combinando horizontales y verticales, imágenes y color
¿Recuerda las pantallas gigantes que adornaban los bares y salas de televisión hace un par de décadas? Esos sets eran un verdadero dolor de cabeza, sobre todo por los altos costos de adquisición, transporte e instalación. Lejos han quedado los días en que estos dispositivos dominaban el mercado. En su lugar, el desarrollo de la tecnología de videowalls ha logrado producir el mismo efecto para diferentes aplicaciones que no limitan al espectador únicamente a una sola imagen.
Hacia la era de las paredes dinámicas
Cuando hablamos de videowalls nos referimos, casi literalmente, a una pared de video. En realidad, se trata de una configuración especial multi-monitor que consiste en un armado de computadoras, proyectores de vídeo y/o pantallas acomodadas a manera de mosaicos para formar una sola pantalla grande. Típicamente, emplean componentes de visualización como paneles LCD, LED, pantallas de proyección combinadas y cubos de retroproyección.
Las pantallas diseñadas para utilizarse en videowalls suelen tener biseles estrechos con el fin de minimizar la llamada parteluz o mullion, una brecha entre las zonas de visualización activas. Por lo general, incluyen el hardware necesario para apilar pantallas similares juntas, junto con conexiones en cadena, así como comandos para vídeo y señales entre displays. Por ejemplo, una señal de mando puede encender y apagar todas las pantallas a la vez o calibrar el brillo de una sola pantalla después de una reparación.
Beneficios de apostar
por una videowall
Las razones para invertir en esta tecnología en lugar de una sola pantalla grande incluyen:
• Conseguir un diseño personalizado y creativo. Al acomodar los displays como si fueran las piezas de un inmenso mosaico, usted puede crear videowalls en prácticamente cualquier tamaño y relación de aspecto. La relación de aspecto (aspect ratio) de un display o imagen es la proporción entre su ancho y su altura. Se calcula dividiendo el ancho por la altura de la imagen visible en pantalla y se expresa normalmente como “X:Y”.
El diseño de la superficie de video de las videowalls no se limita necesariamente a los estándares más comunes de aspect ratio, como el de 16:9. Éste es el utilizado en pantallas de alta definición; es ancho y normalmente se le suele llamar panorámico o widescreen. Además, las pantallas individuales en una videowall pueden estar orientadas horizontal o verticalmente, e incluso pueden incluir una combinación de ambos, potenciando aún más las posibilidades creativas.
• Abarcar una mayor área de la proyección por costo unitario. Un proyector por lo general requiere colocarse a una distancia significativa de la pared para producir una imagen que llene una parte sustancial del muro. Estos requisitos pueden limitar el número de personas permitidas en la habitación sin bloquear la imagen proyectada, incluso cuando se utilizan lentes especiales de gran angular. Gracias a la profundidad fija de cada pantalla, las videowalls conformadas por paneles planos o cubos de proyección ocupan un espacio reducido.
Esta profundidad se mantiene constante, independientemente de qué tan grande pueda llegar a ser la videowall. Por ejemplo, una matriz de visualización de 20 unidades de ancho y 10 unidades de alto comparte la misma profundidad de un único dispositivo de visualización.
• Obtener una mayor densidad de pixeles por unidad de costo, sobre todo si se compara con el gasto que representaría fabricar una pantalla personalizada con forma, tamaño o resolución inusuales. La densidad de pixeles, entendida como el número de píxeles por unidad de superficie, se determina por el tamaño y resolución del display de una pantalla.
Cuando se amplía una imagen proyectada, la densidad de píxeles disminuye. Sin embargo, para una videowall, la densidad de píxel es constante, independientemente del tamaño de la matriz, ya que se basa en la unidad de visualización individual. Un videowall, generalmente ofrece una mayor densidad de pixeles que una imagen proyectada del mismo tamaño.
Las imágenes que abarcan mucho espacio necesitan suficiente resolución o densidad de píxeles para ofrecer un contenido claro y legible. Por ejemplo, en dos gráficos de igual tamaño, uno proyectado por un equipo 1080p alimentado por un procesador multi-ventana, mientras que el otro proviene de un videowall de 3×3 con paneles de 1080p. Ambos están presentando el mismo contenido y con fuentes de entrada de alta definición. Sin embargo, la videowall puede presentar el contenido con nueve veces más pixeles en comparación con la imagen proyectada sola. Este aumento de la resolución, como resultado de una mayor densidad de pixeles, permite la presentación de una fila de tres fuentes de vídeo HD a resolución completa.
• Presentar varias imágenes a la vez. La mayoría de las pantallas planas y los cubos de proyección tienen escaladores internos que permiten que una sola imagen se extienda a través de un conjunto de displays. Esto puede resultar útil para aplicaciones que sólo utilizan videowalls para la visualización de una sola imagen de gran tamaño.
Para aplicaciones que requieren la presentación simultánea de múltiples fuentes de imagen, Extron Electronics recomienda emplear un controlador o procesador de video (es decir, un dispositivo que divide una sola imagen en partes que se mostrarán en las pantallas individuales). Éste proporciona la flexibilidad para presentar múltiples fuentes en un menor número de pantallas al permitir al usuario mostrar varias ventanas de código en cada pantalla. Las ventanas pueden ser reposicionadas y redimensionadas como sea necesario para acomodar el número de imágenes a presentar.
Aplicaciones y clientes principales
Los videowalls pueden utilizarse principalmente en los siguientes recintos:
• Cuartos de mando o sistemas de monitoreo de seguridad.
• Estudios y cadenas de televisión.
• Salas de junta donde se lleven a cabo presentaciones o video-conferencias.
• Estadios, auditorios, salas de conciertos y pasarelas de moda.
• Tiendas departamentales y centros comerciales.
• Área de recuperación de equipaje y monitores para anunciar salidas y llegadas en aeropuertos y centrales de autobuses muy concurridas.
• Recintos donde el público necesite visualizar contenido tanto de cerca como de lejos (lo que exige alta densidad de pixeles y gran tamaño). Por ejemplo, bibliotecas púbicas, cines, instituciones educativas, restaurantes/bares, hoteles, entre otros.
Panorama nacional
En México, este tipo de tecnología es fabricada y distribuida por empresas como Lumtec, Grupo Covix, Samsung y Piu-México. Cada uno ofrece distintas modalidades y componentes para armar una videowall, tales como sistemas que incorporan retroproyectores y cubos, hasta mosaicos elaborados con pantallas individuales.
Agradecemos a la empresa Extron Electronics por la información e imágenes proporcionada para la elaboración de este artículo.
