El Empaque Flexible considerado como el envase inteligente en la industria de alimenticia, tiene la función principal de alargar la vida útil de los productos. Viene a desplazar, a las latas, las botellas, el vidrio e incluso el cartón, considerándose como la próxima generación en materia de empaquetamiento.
Este nuevo estilo de elaboración, nos da ventajas no sólo económicas y ambientales, si no incluso en el ámbito de innovación mercadológica, perfeccionando una serie de funciones para los productos de alimentos, bebidas, para el hogar, farmacéuticos, entre otros.
BENEFICIOS
Es un producto que no solamente brinda beneficios económicos y ecológicos, si no que cuenta con la función de proteger, transportar, mostrar, y preservar, al mismo tiempo, el producto que contiene.
Entre los distintos y cuantiosos beneficios, podemos mencionar que:
1. Favorece en el ámbito de costos y sustentabilidad.
2. Genera un 60% de ahorro en el costo del envase y en la fabricación del mismo.
3. Genera ahorros en el aspecto del relleno del envase.
4. Se considera una solución sustentable puesto que contamina el planeta 60% menos al ocupar una mínima cantidad de material.
5. Disminuye el uso del transporte, el cual genera gases contaminantes para el aire.
CARACTERÍSTICAS
Luce Novedoso y Actual
Nos permite el 100% del envase para abocetar, rotular o hacer publicidad en el mismo. Esto quiere decir que posibilita la impresión en la totalidad del envase (ya sea por el frente, reverso, o debajo) de lo que se desee, facilitando todos los costados del producto para implementar ideas que fomenten la compra del producto en venta.
Al mismo tiempo, permite el diseño versátil: se le pueden dar formas especiales; se le puede hacer la forma que uno desea para que se pueda ir marcando la tendencia de su marca a través de dicho empaque.Un ejemplo son las latas de atún que ya se han transformado en sobres. Además de volverse un producto práctico, luce ahora como algo flamante y original.
Ventajas Contra el Plástico y el Vidrio
Una de las demandas más frecuentes en el mercado es que los productos frescos prolonguen su duración, por lo que es necesario crear empaques adaptables, con el propósito de mantenerlos en las condiciones necesarias para su conservación.
Por lo tanto, los empaques inteligentes se han formado con un especial proceso de laminación, el cual es de varias y distintas capas, ayudando a que el producto se pueda conservar, a mantenerlo fresco y hacer que las vitaminas y los componentes importantes para el cuerpo puedan alargar su vida útil.
Flexibilidad
Por medio de este nuevo tipo de formato se puede lograr una vasta flexibilidad, la cual abre un mundo de posibilidades de poder diseñar elementos atractivos que generen o atraigan la venta del producto. Permite la libertad de la toma de decisiones respecto a la elaboración del artículo o producto, posibilitando el control del paso del oxigeno de manera selectiva, así como de composiciones aromáticas. Facilita que se pueda lograr que el producto llegue a desprender cierto aroma, que tome el aspecto de cristal e incluso que convivan distintos productos totalmente diferentes en el mismo empaque; como por ejemplo las cápsulas para lavado, que en un mismo envase, contienen abrillantador, detergente y quita manchas.
Económico y sustentable
Es tan económico que permite sacar nuevas y distintas versiones que puedan servir para los múltiples ritmos de vida. Además de utilizar un espacio menor, al ya no ser utilizado y desechado, genera catorce veces menos basura de lo que generarían las botellas ordinarias.
Tendencias en innovación
Los empaques inteligentes, han evolucionado para adecuarse a los nuevos estilos de vida, facilitando la manipulación y la preparación de los alimentos. Se han creado envases que interactúan con el usuario, para de tal manera poder garantizar la vida útil del alimento junto con sus propiedades sensoriales. Esto quiere decir que son diseñados para medir y comunicarle al usuario las condiciones ambientales del producto, permitiendo que puedan indicar el estado de frescura, madurez, integridad y seguridad de uso de los alimentos.
Nos referimos a los envases que se les ha implementado un dispositivo que cambia de color cuando las características ambientales del contenido han cambiado, tales como el sabor o el deterioro de sus propiedades nutricionales. Un ejemplo son las botellas de leche que cambian de color cuando ésta se agría.
Así podemos mencionar que el empaque flexible se ajusta a la caducidad que tenga el producto: si el producto en venta dura 3 meses, el empaque puesto para el mismo será adecuado para que dure 3 meses, pero si se requiere que dure dos años, se adecúa la configuración de laminado para que de tal manera dure los 2 años necesarios. De igual forma, se pueden encontrar otros envases auto-calentables, permitiendo ser introducidos al microondas, el cual emitirá un sonido acústico para avisar que el producto ha llegado a la temperatura adecuada en la que se debe de comer.
Es importante indicar que el proceso planteado no cuenta con efectos secundarios. Los componentes del empaque se mantienen muy similares a los que ya conocemos, cambiando solamente el espesor de lo que contiene. Nos encontramos, entonces, con empaques que además de ser económicos, amigables con el ambiente, innovadores y permisivos en el espacio para el diseño, son empaques inteligentes que otorgan la posibilidad de generar una variedad de nuevos y distintos productos, así como brindando comodidad y ayuda en la preparación y manipulación de los alimentos.