El acrílico puede ser hasta 200 veces más resistente que el vidrio, es extremadamente transparente, resistente al agua y al sol, puede ser cortado, lijado y moldeado facilmente, por lo que se ha vuelto imprescindible en la industria de la señalización moderna.
l acrílico es uno de los grandes protagonistas de la señalización y rotulación de nuestro tiempo, tanto en interiores como exteriores.
Hablemos del PMMA
El acrílico o Polimetacrilato de Metilo (PMMA) aparece por primera vez en 1928 cuando el químico alemán W. Bauer desarrolla un nuevo material plástico transparente capaz de sustituir al vidrio, ya que tiene la ventaja de que no se astilla. Gracias a esta cualidad, durante la Segunda Guerra Mundial este plástico fue producido a escala industrial.
El acrílico es un material plástico que se obtiene por la polimerización catalizada del monómero metil metacrilato, Es un termoplástico, por lo que se derrite con calor y se vuelve a endurecer con el frío (se deforma a una temperatura aproximada de 180°C y le podemos dar la forma que nosotros deseemos). Una vez frío, conservará esa forma indefinidamente, esto nos permite realizar figuras y diseños extraordinarios con los cuales podemos exhibir algún producto o publicidad.
Podemos verlo como logotipos en tótems, formando las letras de grandes tiendas departamentales, como material de señalización en interiores para baños y oficinas o como letras corpóreas, también como atractivos displays para punto de venta, frentes o letras en cajas de luz.
También lo encontramos en Stands en ferias Podiums,Vitrinas, exhibidores, Tombolas y una infinidad de aplicaciones.
Hay dos tipos comunes de acrílico: el Cell Cast y el extruido. La diferencia entre estos dos materiales es su método de fabricación, el acrílico extruido se fabrica en máquinas automatizadas que combinan “pellets“ de resina de acrílico (pequeñas bolitas o gránulos) con monómeros y un catalizador. Éstas se hacen pasar en forma semi fundida a través de rodillos que lo presionan y producen al final el grosor y el acabado deseado de las placas. El acrílico de extrusión posee una excelente transparencia, buenas propiedades mecánicas y una gran resistencia frente a los factores meteorológicos y a los rayos ultravioletas permaneciendo su color constante durante el paso de los años, además de ser más económico.
Por su parte, el acrílico Cell Cast es producido por medio de moldes -un molde para cada hoja-. En estos moldes se vierte el material de acrílico fundido con un embudo; por lo general, son grandes placas de vidrio separadas por una junta para dar el espesor de los materiales, luego se colocan en tanques de curado, éstos posteriormente son colocados en un horno para terminar su curación y finalmente las placas se enfrían y desarman para ser inspeccionadas y preparadas para ponerse a la venta.
Este material es de mejor calidad, apariencia agradable, de brillo superior, con facilidad para su doblez resistente y liviano.
Son un excelente aislante del calor y el ruido. Su inconveniente es que se pueden rayar fácilmente y son muy sensibles a los solventes como la acetona o el benceno, además de que es un material flamable y se mancha fácilmente.
El acrílico cuenta con varias ventajas en comparación con el vidrio, una de ellas es la transparencia, ya que es similar a la de un cristal , gracias a su versatilidad fácilmente adquiere la forma que nosotros deseemos, lo podemos doblar o termoformar dándole efectos tridimensionales, puede estar expuesto a largos periodos de tiempo bajo los rayos del sol y a las inclemencias del tiempo, sin perder su brillo y color. Es hasta 200 veces mas resistente que el vidrio, además cuenta con variedad de colores, traslúcidos y sólidos con la ventaja de que pesa casi 50% menos que un vidrio, lo podemos encontrar en una gran cantidad de medidas, anchos y largos, así como acabados matte, espejo, antirreflejante, antiestático, etc.,
Actualmente es posible encontrar muchos diseños, colores y acabados en las placas de acrílico que abren un mundo de posibilidades para su uso en arquitectura y decoración, sectores en los que cada vez se emplea más frecuentemente. El PMMA no es tóxico si está totalmente polimerizado. Su componente el MMA (monómero de metacrilato de metilo) sí lo es en fase líquida.
Trabajando el acrílico
Comercialmente se vende en planchas de varios espesores y tamaños, en forma de tubos, cubos, barras y perfiles (en L, en U, etc). Las planchas suelen venir protegidas en ambas caras por una película plástica de polietileno que se pega al material por medio de estática, para no dejar residuos y evitar arañazos leves y golpes durante su transporte y manipulación.
El acrílico se puede trabajar mecánicamente con las herramientas habituales que se usan para metales. Al ser un sólido se puede perforar, lijar, cortar como los metales y maderas, se puede doblar por calor, partir mecánicamente como los cristales y se puede derretir por calor o químicamente como la mayor parte de los plásticos.
Para cortarlo podemos usar una sierra de banco o Router. Para los cortes curvos se puede recurrir a una sierra caladora con hoja para plásticos, a una fresadora con fresa de ranurar sin usar la guía para cortes rectos o a una segueta si tienes la paciencia y la experiencia suficiente.
Es recomendable durante los cortes no retirar la película protectora del material para evitar rayados por el roce de las herramientas, la mesa de corte o cualquier otro elemento del lugar de trabajo.
Durante la manipulación de estos materiales pueden aparecer grietas muy visibles y que echan a perder el material. Estas grietas se producen principalmente si durante la manipulación se dan dos o más de estas circunstancias a la vez: tensiones extremadamente fuertes o procesos de corte incorrecto al no utilizar una herramienta apropiada, disco navaja o velocidad.
Doblar y moldear
Para doblar o moldear el Acrílico, es necesario calentarlo previamente a una temperatura que lo haga maleable sin llegar a hacerlo fluido. La temperatura ideal para trabajarlo es entre 150ºC y 180ºC aunque depende del material. En este caso, es recomendable eliminar la película protectora antes de calentar la pieza, ya que de lo contrario derretiremos la misma y se mezclará con el metacrilato, estropeándolo y manchándolo.
Si sólo se pretende doblar el material lo mejor es usar una tenaza para doblar o pistola de calor, no se debe usar un soldador de gas de plomería ni antorchas porque el material es flamable y además la llama puede producir una mancha que será difícil de quitar.
También existen herramientas especiales consistentes en una banda resistiva -como una manta eléctrica pero alargada y estrecha- capaz de calentar por ambos lados la plancha de acrílico para doblarlo.
El procedimiento para doblar es asegurar bien la plancha, dejando la zona de doblado sobresalir de la mesa y calentar únicamente la banda por donde queramos doblar. Una vez que el material empiece a doblarse por efecto de la gravedad, lo colocamos en la posición que vaya a tener y dejamos enfriar.
En todos los casos, cuando se enfría, el material tiene la tendencia a recuperar algo de su estado inicial enderezándose, por lo que habrá que asegurar la pieza en su lugar final, pero sin tocarla con las manos desnudas (no queremos quemarnos ni dejar huellas o marcas). Dependiendo del espesor del acrílico, es posible que sea necesario calentarlo por ambos lados para poder doblarlo.
Para unirlo podemos usar adhesivos de polimeración o de disolución, el primero utiliza un catalizador para producir la reacción química que soldará el acrílico en las diversas partes a unirse; el segundo diluye el material para que se una por evaporación, las marcas más usadas son AdCryl y PG plus.
Impresión
El acrílico si acepta impresión digital con equipos de cama plana que acepte el grosor del acrílico y depende de la concentración del solvente en la tinta, sustancias que resiste el producto y porcentajes, para obtener una excelente impresión.
El acrílico se daña fácilmente al contacto con solventes por lo que para ser impreso debe tenerse mucho cuidado, se puede usar tinta solvente o ecosolvente pero debe ser impreso en una sola pasada, ya que los solventes presentes en la tinta pueden dañar el acrílico y como señal aparecerán pequeñas cuarteaduras que estropearán el material.
También acepta la impresión por serigrafia
Durabilidad
El acrílico puede conservar su apariencia por mucho tiempo, pero en exteriores suele maltratarse por el polvo, la lluvia o los rayos ultravioleta del sol. Para darle mantenimiento se puede utilizar un químico llamado Novus 1 y Novus 2, el primero nos ayudará a limpiarlo y quitar la estática, mientras que el segundo nos permitirá pulir el acrílico para quitar rayones y manchas indeseables.
Por último, se recomienda no almacenar las láminas de acrílico en sitios muy próximos a cámaras de pintura, radiadores, productos calientes, líneas de vapor o cerca de áreas de impresión, debido a que los solventes podrán pasar la protección y cambiar la calidad de la superficie.
La lámina acrílica se limpia con facilidad humedeciendo con agua muy levemente una franela suave y limpia. No se aconseja usar jabones u otros productos de limpieza porque tienden a opacarlo.
Hay que procurar no retirar la película protectora para marcar los diseños de nuestro proyecto, ya que las marcas de los plumones para pizarrones no se borran.
Agradecemos a Esther Franco responsable de Edicion de Videos de Avance y Tecnología en Plasticos y a Marcela Estrada de Plastimundo la ayuda para la realización de este artículo.