La densidad de las tintas se mide con un espectrofotómetro, y esto permite hacer un cálculo acertado de la cantidad que se necesita para cada sustrato.
Todo impresor debe comprender que, en la búsqueda de buenos resultados, ahorrar no significa pagar lo menos posible, sino utilizar sus recursos de manera inteligente. En México, las empresas de impresión no perfilan sus equipos, sobre todo por falta de información. Muchos no saben qué es un perfil de corrección de color o para qué sirve, pero una vez que conocen los beneficios de este servicio se interesan cada vez más en él.
Calcular la tinta que consume nuestro equipo y generar sistemas de ahorro y optimización no es tarea sencilla, pero vale la pena, pues no sólo nos permite reducir costos, sino mantener nuestro equipo de impresión en buen estado.
Perfil de corrección de color
Un perfil de corrección de color es la configuración que se hace a un equipo para aprovechar al máximo la tinta funciona básicamente mediante un sistema de restricción y dosificación de la tintas y varía de acuerdo a los sustratos en los que se imprime. Para hacer un trabajo de perfilación deben considerarse varios factores.
Generalmente, los equipos vienen de fábrica con un software muy básico como Ultra Print o Color Print, que no permiten calcular el uso de la tinta ni trabajar con perfiles de corrección de color, de manera que el primer paso para calcular y reducir el uso de tinta es verificar con qué software trabaja nuestro equipo. Si es muy básico, no servirá para trabajar con perfiles, pero es posible instalar a la máquina que ya se está usando, un software más sofisticado como Foto Print, Wasatch, Onyx o Caldera, cada uno de ellos tiene soporte para diferentes marcas y usted puede consultar cuál es compatible con su equipo.
El segundo paso es, por supuesto, la elección de la tinta. En el mercado existe una gran variedad de ellas, marcas, composición química, funciones, utilidades, etc. Para determinar cuál es la más adecuada para nuestro equipo, es necesario considerar con qué cabezales trabaja la impresora y cuáles son sus requerimientos de densidad y composición, además de cuáles recomienda el fabricante, y por qué. Una vez que estamos usando la tinta correcta es momento de optimizar su uso.
Pasos básicos para el trabajo de perfilación
Una vez que conocemos el tipo de tinta, el cabezal y el Rip, se puede hacer un buen trabajo de perfilación tomando en consideración algunos puntos básicos:
– Software para perfilar.
– Requerimientos del cliente donde hay que considerar tres variables básicas:
1- Materiales en que se imprime. Cada uno tiene diferentes grados de absorción y tensión en la superficie, así que algunos necesitan más o menos tinta.
2- Resolución o calidad, determinada por el software y el cabezal, aunque algunos impresores trabajan con una resolución específica.
3- Número de pasadas que requiere el equipo para lograr una impresión, a partir de las 3 o 4 pasadas, se comienza a ahorrar tinta.
Los equipos de impresión están configurados para usar la máxima saturación de cada tinta, que se calcula en una escala del 1 al 100. Contrario a lo que se cree, usar la tinta en un nivel 100 en cada pasada de la impresión, no obtiene los mejores resultados y gasta más, pues crea una especie de plasta sobre el sustrato en cada pasada.
Por ejemplo, en las tintas de Nazdar, la densidad de color adecuada para trabajar el cyan es de 1.6. Si después de la primera pasada en un equipo sin perfilar, medimos la densidad de la tinta, ésta no alcanzará este valor. Pero después de la cuarta se obtendría un 2.4 de densidad, es decir que se estaría gastando más tinta de la necesaria, y como consecuencia, los colores podrían variar respecto al diseño original.
Trabajo de Perfilación
La base para crear un perfil de corrección de color consta de 3 pasos.
1- Restricción de las tintas, ejemplo:
Cyan- 70
Magenta- 75
Amarillo- 60
Negro- 75
Si sumamos los valores y los dividimos entre 4, obtendremos una media aritmética que nos permitirá hacer una curva de densidades.
2- Curva de densidades.
Como ya hice una restricción de tinta, por ejemplo al 70%, la curva de color será ahora del 0 al 70, de modo que el 70 se convierte en el nuevo 100. Luego hacemos una curva de cada color con sus propios valores, y la máquina los trabajará a este nivel de saturación.
3- Segunda restricción de tintas.
Una vez que los colores ya están combinados, obtenemos una restricción de tinta total que puede alcanzar el 30% y se traduce en ahorro económico.
Una vez concluidos estos pasos, comienza el proceso de perfilación, para el cual necesitamos de un espectrofotómetro, un programa para crear perfiles como Monaco Profiles, Profile Maker entre otros y un programa para medir densidades como el Colorshop u otros.
Se envían diferentes tipos de impresión con diferentes cantidades de parches (cuadros de color diferentes) que pueden ser de 300, 530 o 917 parches, o en impresoras con mucha resolución, 1200 o 1400 parches.
Posteriormente se escanean con el espectrofotómetro estos parches y nos devuelve un valor delta (Δ), que como en estadística, es un error de desviación.
Si Δ=1 Los colores están igual a pintura automotriz.
Si Δ>1 y Δ<2 La variación de color no es perceptible al ojo humano.
Si Δ<1 Se hizo un excelente trabajo de perfilación, al estar por debajo de la pintura automotriz
Es importante destacar que se necesita un perfil para cada tipo de sustrato en el que se imprime.
El perfil de corrección de color obtenido se guarda en un archivo y cada vez que lo necesitemos, solo debemos cargarlo en el software Rip utilizado, ya sea Foto Print, Wasatch, Onyx o Caldera y obtendremos la misma configuración de tintas que guardamos.
Los equipos necesarios para la perfilación son muy costosos, por lo que a un impresor no le conviene invertir en ellos, sino contratar este servicio a una empresa externa, el único requisito es tener un software Rip avanzado.
Perfilar los equipos para cada tipo de sustrato, representa un ahorro de tiempo y de tinta (dinero), valdría la pena que los impresores analizaran la posibilidad de incluir esta inversión en sus talleres.
Agradecemos a Juan Pablo García y a Manuel Vega Gerente de Operaciones Nazdar México