El UV continúa en pleno desarrollo y como toda tecnología, presenta virtudes y cuidados en su uso.
La industria de la impresión digital demanda una innovación constante en las diferentes aplicaciones que se pueden ofrecen a los clientes. Los equipos con tecnología UV han respondido a esta demanda; sin embargo, como cualquier otro avance, su uso ofrece ventajas y desventajas.
Aunque siempre se ha resaltado el rápido desarrollo del UV, el mercado actual presenta equipos con otro tipo de tintas, como base solvente, agua y latex. Bajo este panorama se puede establecer que el crecimiento de los equipos UV no significa el reemplazo de los equipos solventes, pues cada uno proporciona beneficios específicos, de acuerdo con los requerimientos de cada aplicación.
El UV integra diversos equipos de impresión, tanto para sustratos flexibles como para rígidos, e incluso híbridos, de diferentes tamaños y para todas las necesidades. A continuación presentamos las ventajas más significativas de la tecnología UV, así como algunos problemas de impresión que puede presentar.
Las virtudes del curado
Una de las ventajas más importantes es que el UV ofrece una adherencia más firme en el sustrato, ya sea rígido o flexible. Esto se debe a que el curado requiere menor tiempo en comparación con el tiempo de secado de las otras tecnologías.
El curado instantáneo del UV permite al impresor tener mayores posibilidades de imprimir en diferentes superficies, incluyendo aquellos sustratos poco tradicionales como vidrio, madera, lámina, tela o cerámica. Aunado a esto, la impresión directa sobre en el material agiliza la producción y ahorra costos de producción al prescindir del barniz UV.
Otro aspecto relevante en la velocidad del curado es la considerable disminución de riesgo de un posible secado de los cabezales pues ya no es necesario el disparo de gotas de tinta en los cabezales para mantenerlos húmedos. Gracias a esto, los inyectores tienden a obstruirse menos, se previene el bandeo y los equipos demandan menos mantenimiento.
El UV no requiere instalar sistemas de ventilación en el área de trabajo, ya que es más amigable con al ambiente, aunque esto no significa que no requiera cuidados en su manejo, almacenamiento y desecho.
La tinta UV es recomendable para impresión en papel bond, kraft revestido, cartón y cualquier otra superficie con porosidad similar. Los equipos con esta tecnología son una buena alternativa para aplicaciones de punto de venta, señalización, ferias y eventos, así como para la impresión de empaques donde se puede usar como soporte una cartulina sulfatada o caple de alto gramaje.
Cuidados al imprimir en uv
El uso de la tecnología UV también tiene sus limitaciones e inconvenientes. Una de ellas es cuando la impresión se lleva a cabo en sustratos reflejantes como espejo, vidrio o cristales transparentes, o bien, en materiales metálicos como acero inoxidable o vinil reflejante. Cuando se imprime en estos sustratos, el reflejo se regresa a la luz de las lámparas UV y se seca en los cabezales, lo que puede generar problemas de calidad en la impresión.
Para evitar esto existen en el mercado máquinas capaces de angular los obturadores para lograr que la luz caiga en forma perpendicular sobre el material o se incline a cierto grado para que el reflejo termine fuera del carro de cabezales.
Asimismo, algunos fabricantes proporcionan manuales con pautas básicas para indicar cuál es el mejor ángulo de inclinación para determinada impresión.
El control sobre los ángulos y la intensidad de la luz de las lámparas UV ayudará a evitar que algunos materiales reaccionen de forma negativa a la acción del calor de las tintas UV. Un ejemplo de esto es el cartón, pues la intensidad de la luz puede ocasionar la pérdida del porcentaje de humedad en este material y, en consecuencia, la superficie del mismo tienda a ondularse.
Otra opción viable es utilizar UV en sustratos reflejantes con ayuda de tinta blanca, que se usa para fondear materiales oscuros o no necesariamente claros. La base blanca ayudará a evitar el reflejo del sustrato.
Otra limitación de la tinta UV es con los materiales flexibles, ya que el proceso de curado la convierte en una tinta semirígida y muy frágil. Debido a esto, en casos donde se utilice un sustrato con alto grado de flexibilidad, como vinilos, hay que tomar en cuenta que la tinta UV puede provocar cierta fragilidad en algunos materiales, causándoles grietas, y un movimiento brusco puede propiciar el deterioro de la tinta.
Por otro lado, las tintas UV producen un aspecto granulado y desigual, por lo que no resultan adecuadas para aplicaciones que requieran calidad fotográfica. También hay que señalar que el UV proporciona un acabado mate, por lo que si se desea un acabado más brillante se deberá utilizar un barniz.
El costo de la tinta ¿Un impedimento?
El uso de la tecnología UV pareciera que demanda una mayor inversión por parte del impresor, ya que el litro de este tipo de tinta es mucho más costoso que el de tinta base solvente.
Sin embargo, las tintas UV garantizan mayor durabilidad y aprovechamiento del capital utilizado. Una tinta base solvente al imprimir se evapora alrededor de un 40% de tinta, mientras que con la tinta UV el desperdicio o evaporación de tinta es del 2%, lo que la convierte en una tecnología más redituable para el impresor.
Antes de implementar algún equipo UV a nuestro negocio, es importante establecer con claridad cuál es el mercado que se busca cubrir, para que de esta manera la inversión se vea consolidada.