Instalar un estudio fotográfico involucra tres aspectos fundamentales: el tamaño del lugar, el equipo adecuado y la gente de apoyo. La decisión en cada uno dependerá del tipo de publicidad al que nos dediquemos.
Entre las alternativas de trabajo de un fotógrafo destaca la fotografía de estudio, que se perfila como una buena opción para quienes gustan de tomar retratos, modelos o productos con fines publicitarios.
Pero ¿qué tan difícil y costoso es crear un estudio fotográfico? Primero debemos tener claros nuestros objetivos, para que con base en ellos se invierta en la búsqueda del espacio adecuado y en la adquisición de los instrumentos necesarios.
Jorge Escamilla, propietario de Todofotografía, empresa dedicada a la venta de equipo y accesorios fotográficos, y Ricardo Segovia, fotógrafo profesional, algunos consejos útiles para aquellos que estén interesados en formar su propio estudio.
EL ESPACIO
El tamaño de los estudios fotográficos varía dependiendo del tipo de fotografía a realizar.
Si es un estudio para retrato, se recomienda tener una superficie desde 12 hasta 40 m2, así como una altura de 3.5 a 5 metros. Estas medidas ayudarán a la colocación estratégica de lámparas, tripiés y otros accesorios.
Los estudios para productos suelen ser un poco más pequeños. Ocupan un espacio de 5 a 12 m2, de acuerdo con el tipo de producto que se vaya a fotografiar. La altura puede ser de 2.5 a 3 metros. Cuando se trabaja con autos o motocicletas, muchas veces se recurre a bodegas.
Se recomienda que los pisos sean de superficie plana, ya sea de madera, loza de cemento, etcétera. Lo más importante es tener espacio suficiente para no crear conflicto entre los asistentes, el fotógrafo y el equipo de trabajo; también es elemental utilizar el espacio más grande para el desplazamiento de la cámara y del fotógrafo.
¿Cerrado o ventilado?
Aunque el estudio debe estar en un lugar donde ninguna luz externa interrumpa, es preciso tener un ambiente fresco a fin de que la potencia de la iluminación continua no genere calor dentro de la habitación. Algunos fotógrafos usan abanicos eléctricos o sistemas de refrigeración para evitar este fenómeno.
En caso de que entre luz natural al cuarto, ésta se puede aprovechar para hacer fotos de estudio, pero es sustancial saber controlar la iluminación que se necesita.
Hay que tener en cuenta que la luz del exterior varía cada minuto lo que afecta en las tomas, por lo que si hay ventanales se sugiere colocar cortinas negras.
La potencia de las lámparas de destello proporciona un mejor efecto que la luz natural.
EL EQUIPO
El equipo que se puede utilizar dentro de un estudio es extenso. Su elección depende de las necesidades y la especialidad del propio fotógrafo.
Los accesorios básicos para equipar un cuarto de fotografía son:
• Lámparas de destello (de preferencia tres). Algunas cuentan con fuente de poder para regular la intensidad de la luz, otras son sólo cabezas de destello que no requieren de dicha fuente para controlar la intensidad.
La intensidad puede ir desde los 100 watts para pequeños o medianos objetos, hasta los 500 u 800 watts para retratos de hasta seis personas u objetos grandes. Si se emplean fuentes de poder, es recomendable utilizar una para cada lámpara.
• Lámpara de luz continua (de una a dos).
• Ciclorama para producto de 1×2 metros. Hecho de acrillo blanco y papel blanco.
• Ciclorama o stand para fondos fotográficos para retratos. Varían los tamaños, el estándar es de 2.5×3 metros.
• Snoots. Son conos para espolear la luz, es decir, cierran el ángulo de salida de la luz para iluminar áreas pequeñas de sólo 20 cm de diámetro, entre ellas el cabello.
• Tripiés para las cabezas (seis mínimo).
• Reflectores blancos, plateados o dorados en diferentes tamaños.
• Cajas suavizadoras o sombrillas blancas (mínimo dos). Ambas se encargan de difuminar la luz a fin de que no llegue directamente al objeto o persona.
Las cajas suavizadoras se presentan en distintas formas y medidas, como cuadradas 30×30 cm o 60×50 cm, rectangulares 30×80 cm, u octagonales de hasta 1.5 m de diámetro.
– Exposímetro.
– Boom para realizar iluminaciones en cenital. Existen desde 1.70 hasta 2.50 m.
– Cables sincronizadores o radio de frecuencia para lámparas de destello.
Aunque esto es en cierta forma lo más básico, hay que destacar que existen miles de materiales para distintos usos. En el mercado podemos encontrar una diversidad de marcas profesionales, sobre todo extranjeras. Entre las principales destacan: Elinchrom, Manfrotto, Multiblitz, Kenko, Firenze, Sumpack, Sinar, Chimera, Tumax, National Geographic, Foba, Cosmo, Kata, Minolta, Hansa, entre otras.
Dado que cada marca diseña sus propios accesorios que no son compatibles con otras, es importante que al momento de adquirir el equipo se compre una marca que dé garantía, servicio y cuyas refacciones puedan encontrarse en el país.
Equipo auxiliar
Como material complementario se puede adquirir lo siguiente:
– Equipos de iluminación continua como los que se usan en filmaciones de cine o video.
– Flashes que se colocan en las zapatas de las cámaras (de cuatro pilas de preferencia). Junto con éstas se emplean esclavas para sincronizar los flashes al momento de la toma.
– Espejos pequeños para obtener reflejos en zonas específicas.
– Cartulina ilustración negra, blanca y de colores. Sirven como fondos o banderas y cubren la iluminación en ciertas áreas del objeto o la persona.
LA CÁMARA
Desde luego, la cámara es una herramienta indispensable. Ésta debe ser profesional y se aconseja que tenga zapata y terminal de PC para conectar el flash. Muchas cámaras del mercado no cuentan con estos accesorios, cuya ausencia llega a complicar el disparo de los flashes.
La calidad de la cámara ayuda a obtener buenas tomas, pero no hace al fotógrafo. Son los conocimientos del profesional los que lograrán una buena exposición.
EL PERSONAL HUMANO
La cantidad de asistentes requeridos varía de acuerdo con el tamaño del estudio y la carga de trabajo que se tenga.
Por lo regular, un fotógrafo necesita un solo asistente para un trabajo básico, pero en grandes producciones es necesario hasta tres o cuatro asistentes para iluminación, imagen digital (manejo de software y cómputo) y logística.
Para fotografías de moda y ropa, se debe pensar en peinadores y maquillistas, además de un diseñador de arte.
TIPS DE ILUMINACIÓN
En la colocación de las lámparas no existen reglas que se sigan al 100%, pues cada fotógrafo va experimentando y según los resultados adquiere su propia forma de trabajar.
La iluminación se define por tres fuentes importantes: la principal, la de relleno y la de separación del fondo.
En objetos traslúcidos como el cristal se utilizan diferentes iluminaciones para crear volumen; en los objetos opacos se puede crear la iluminación básica antes mencionada.
En las personas también se recurre a la iluminación base. Sin embargo, es primordial estudiar los rostros y colores de piel para crear un tipo de luz adecuada para esa persona. Por ejemplo, si necesita textura se ilumina con luz dura (la que sale directa de la lámpara); si se tiene que eliminar texturas de piel se emplean cajas suavizadoras
Paul II: Les Images D’une Vie.