Mitos y realidades de los LEDs

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Como toda buena tecnología vanguardista, los LEDs han ofrecido productividad, eficiencia y versatilidad a través de sus distintas aplicaciones. Pero, ¿qué secretos se esconden detrás del diodo más famoso de la historia?

led-21.Los LEDs son tan poderosos que no es necesario calcular el brillo de la pantalla: ésta iluminará igual de día y de noche.

Este mito no es del todo cierto, especialmente porque no todos los LEDs son iguales. El brillo de un LED está en función de la calidad y tipo de diodo que el fabricante utilice. Por ende, la vida útil de una pantalla o una caja de luz con esta tecnología está condicionada por ciertos parámetros y características intrínsecas del LED. Para empezar, los LEDs sólo son considerados “efectivos” cuando se encuentran en su punto más brillante. A diferencia de otros tipos de focos, los LEDs no se funden o descomponen súbitamente. Lo que sucede es que su proceso de desgaste natural provoca que se atenuen con el tiempo. Cuando un LED llega al 70% de su brillo original, se dice que ha “muerto” y, por lo tanto, ya es tiempo de reemplazarlo. Como se dijo anteriormente, no es que el LED ya no funcione, sólo dejó de ser lo suficientemente brillante para poder usarse como fuente de iluminación.
El brillo de un LED se mide en lumens o nits. Estos últimos son la medida de candelas por metro cuadrado. A su vez, una candela se ha definido históricamente como la cantidad de intensidad luminosa irradiada por una vela. En términos técnicos, de acuerdo a lo establecido en la Conferencia General de Pesas y Medidas de 1948, una candela se conoce como la sexagésima parte de la luz emitida por un centímetro cuadrado de platino puro en estado sólido a la temperatura de su punto de fusión (2046 K).
La brillantez de un LED se calcula de acuerdo a cuántas candelas de luz arroja en un metro cuadrado. Aunque la vida útil de los diferentes tipos de LEDs en el mercado puede variar, en promedio se necesitan alrededor de 10 años para que un diodo llegue al 70% de su capacidad. Asimismo, a mayor cantidad de nits en un LED, mayor grado de brillantez. Es por ello que conocer los nits y lumens de un LED es importante para el buen funcionamiento de su aplicación. Para exteriores, un letrero iluminado con LEDs de menos de 6,000 nits resultará ilegible al amanecer y anochecer, ya que su luminosidad no podrá competir contra la luz solar que golpea directamente la cara del anuncio en esos momentos del día. Se recomienda emplear LEDs con un valor entre 7,500-10,000 nits para estas aplicaciones, mientras que un rango de 3,000-6,000 resulta aceptable para interiores o lugares donde los rayos del sol no incidan sobre ellos directamente.

2. La ubicación de la pantalla o display LED es el único factor que afecta el ángulo de visibilidad.
Aunque la ubicación sí es un factor determinante, el LED es quien establece el ángulo de visibilidad de una aplicación. En primer lugar, el ángulo de visibilidad LED se refiere al ángulo en el que se visualiza el anuncio o pantalla. En otras palabras, esta característica define la posición desde la que el espectador puede identificar y apreciar claramente una imagen en una pantalla plana. Un LED cuenta con un rango de visibilidad que va de 100º a 160º, tomando como referencia un eje horizontal. Al ver a un anuncio LED de frente, el contenido aparece nítido y legible. Sin embargo, a medida que usted camina alrededor de la aplicación y la observa desde diferentes ángulos, esta cualidad cambia. Por lo general, el ángulo de visión LED suele estar entre los 60º y los 90º respecto a la horizontal.

3. Siempre hay que escoger la mayor resolución posible para una pantalla LED.
La distancia entre los pixeles de una pantalla suele ser medida en milímetros y recibe el nombre de pixel pitch. Entre más grande es el pixel pitch, la imagen será más propensa a sufrir el efecto de “pixelización”, es decir, se volverá borrosa. Entre más cercanos estén posicionados los LEDs en un módulo, éste tendrá más pixeles por metro cuadrado. Si su pantalla cuenta con un gran número de pixeles, usted podrá ofrecer imágenes de mayor calidad y detalle.
Esto no quiere decir que los módulos con un pitch muy amplio no funcionen para su aplicación. Por ejemplo, digamos que usted quiere instalar una pantalla o display a una altura de 100 metros del nivel de la calle. Supongamos también que sus clientes potenciales estarán observando continuamente la pantalla desde una distancia de 200 metros. Desde dicha distancia, francamente nadie podría notar la diferencia entre un módulo con un pitch de 10 mm o 20 mm. Habiendo aclarado esto, podemos deducir que entre más espacio haya entre el espectador y el letrero, la resolución que su aplicación necesita será menor. Esto le dará mayor libertad de elegir un pixel pitch más grande, dado que los pixeles se mezclaran unos con otros a través de la distancia.
Para ilustrar este punto, imagine que observa la pantalla de su televisión o computadora muy de cerca o a través de una lupa. Puede ver todos los pixeles individuales que la conforman. Normalmente no los percibimos porque estamos sentados a unos cuántos metros de distancia de ella. Los displays de LEDs funcionan de la misma manera, están diseñados para que las imágenes que despliegan se adecúen a las distancias óptimas de visualización. Si su cliente estará observando la pantalla desde unos 20 o 30 metros, se recomienda que elija displays de 16 o 20 mm. Si en cambio éste se encontrará a 30 o 40 metros, un módulo de 30-40 mm será suficiente.

A diferencia de los focos, los LEDs no se “funden” de repente o cesan de funcionar. Cuando un LED llega al 70% de su capacidad, se dice que ha “muerto”, ya que dejó de ser lo suficientemente brillante para usarse en alguna aplicación.

4.El diseño Louver es un estándar fijo para todos los sistemas LED.
Al igual que el grado de brillantez, el diseño Louver es una característica que depende de cada fabricante. En la industria de la iluminación, el louver o difusor es un componente en forma de aleta o persiana que evita el encandilamiento directo provocado por una fuente de luz. En la manufactura de pantallas y módulos LED, el diseño Louver es una herramienta para evitar que se desperdicie la luz producida por el LED, sobre todo durante el día cuando el sol se encuentra en su máximo apogeo.
La mayoría de los fabricantes de pantallas o displays dinámicos suelen colocar louvers para cubrir una hilera completa de LEDs, mientras que algunos otros se dan a la tarea diseñar mini louvers individuales para cada diodo o pixel.
El louver actúa como una visera que le ofrece sombra a los LEDs a la par de que refleja la luz solar de vuelta a la atmósfera. De este modo se pretenden generar mayores condiciones de visibilidad, brillo y contraste para la pantalla. Sin embargo, la desventaja de los difusores es que sus diseños tradicionales pueden llegar a reflejar la luz solar directamente a la cara del observador.

5.Las pantallas LED funcionan igual en cualquier clima o temperatura.
Aunque esto depende en gran medida de los componentes que se utilicen, si no se cuenta con un sistema de ventilación adecuado, es probable que su aplicación no funcione adecuadamente o se descomponga si hace mucho calor afuera. Aunque algunas pantallas cuentan con ventiladores en la parte superior para regular la temperatura interna del aparato, no todos los fabricantes incluyen sensores termostáticos en sus productos.
La misión del sensor es apagar los ventiladores cuando no hace calor. Al hacer esto, no sólo ahorra energía, sino que alarga la vida del ventilador al dejarlo descansar cuando no se necesita. Si un ventilador está encendido todos los días y a todas horas, pasarán sólo tres o cuatro años antes de que cese de funcionar y se requiera reemplazar la pieza. Muchas personas no sabrán reconocer cuando su ventilador ya no sirve porque rara vez le prestan atención. Su condición se manifestará cuando la pantalla o display deje de trabajar por una sobrecarga de calor.

Agradecemos a Deacon Wardlow la información proporcionada para la elaboración de este artículo.

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